Conozca a la abogada de inmigración Carina Patritti, quien recientemente obtuvo una increíble victoria de asilo para sus jóvenes clientes, los hermanos E y R.

E y R vinieron de El Salvador en 2014, llegando como niños no acompañados a la edad de 15 y 13 años, respectivamente. En El Salvador, E y R sufrieron severos abusos físicos y psicológicos por parte de su abuelo y otros cuidadores, quienes también las obligaron a realizar trabajo infantil.

Hay mucho miedo en las comunidades de inmigrantes. Estamos aquí para explicarles sus derechos y darles una voz.

Carina y el equipo de LAS comenzaron a trabajar con los hermanos un año después de su llegada y presentaron sus solicitudes de asilo ante la Oficina de Asilo. La Oficina de Asilo no concedió sus solicitudes a pesar de la voluminosa evidencia de abuso y remitió sus casos a un Juez de la Corte de Inmigración. Cinco años después de que ingresaron a los Estados Unidos, tuvieron su juicio en la corte. A pesar de un paquete de pruebas que demostraba el abuso que E y R habían sufrido (incluidas fotos de las autolesiones que E se infligió a sí mismo como resultado de ese abuso y el diagnóstico de trastorno de estrés postraumático para ambos hermanos), el abogado del gobierno insistió. que los hermanos tendrían que declarar, retraumatizándolos y exacerbando el dolor que soportaban.

Estos fueron algunos de mis primeros clientes, por lo que lograr esta victoria después de cuatro años fue increíble.

Finalmente, después del agotador testimonio de E, en el que valientemente habló sobre los muchos años de abuso severo que él y su hermano habían experimentado y su impacto en su bienestar psicológico, el juez y el abogado del gobierno determinaron que nadie más necesitaría testificar.

¡Gracias a un increíble esfuerzo de colaboración entre Carina, una trabajadora social juvenil de LAS y un asistente legal, el juez de inmigración emitió una decisión por escrito que otorgó asilo a ambos hermanos en junio de 2019!