Legal Aid se ha unido a un creciente coro de funcionarios electos y defensores legales que consideran que el edificio del Tribunal de Vivienda de Brooklyn representa un peligro tanto para los visitantes como para el personal debido al riesgo de contraer COVID-19. El edificio, conocido por sus pasillos angostos y sus diminutas salas de reuniones sin ventanas, ha sido objeto de preocupación cuando los tribunales comenzaron el proceso de reapertura el mes pasado, y muchos dudaron incluso de la posibilidad de un distanciamiento social responsable dentro de su interior. Las llamadas para retrasar los procedimientos o reubicar el tribunal en un edificio más adecuado para los problemas de salud pública solo han aumentado en las últimas semanas, informa WNYC.

La Legal Aid Society y otros defensores públicos han presionado enérgicamente para que se retrasen los procedimientos, especialmente considerando el impacto potencialmente ruinoso de los desalojos que se producen en un momento en que las consecuencias económicas del cierre por el COVID-19 impuesto por el estado han hecho añicos la seguridad financiera de muchos neoyorquinos.

“Creemos que es inapropiado presentar cualquier caso ante un tribunal de vivienda en este momento en medio de una crisis de salud pública”, dijo Judith Goldiner, abogada de vivienda de The Legal Aid Society.